Algunos pueden
sorprenderse de que elija esta producción francesa por la que no han pasado ni
treinta años. Veinticinco exactamente desde su estreno en España. Pero si hay
una película contemporánea, que resuma todo la tradición y el prestigio del
cine francés clásico, sin lugar a dudas es esta. Después de volver a verla, para mi conserva intacto el encanto que desprendía
desde que la vi en los desaparecidos cines Duplex, de Logroño mi ciudad.
El éxito de la
cinta asimismo logró que el nombre de Marcel
Pagnol, volviera a la actualidad, tras décadas de olvido. Un interés que
tuvo su continuación en la dupla de filmes autobiográficos “La gloria de mi padre” y “El castillo de mi madre” donde con
acierto Yves Robert recreaba la
infancia del autor. En los últimos años Daniel
Auteuil, en su doble faceta de actor y director ha llevado al cine en 2011 “La fille du puisatier”. En 2014 piensa
estrenar la última parte de la trilogía comenzada en 2013, sobre Marsella,
compuesta al igual que los filmes rodados por Pagnol en los años treinta por
los títulos ”Marius”, “Fanny” y “Cesar”.
Precisamente
Daniel Auteuil alcanzó la fama con el personaje de “Ugolin” de “El manantial de
las colinas”. En esta coproducción con Italia, Berri le colocó al lado de dos
de los actores más carismáticos del cine francés: Ives Montand y Gérard Depardieu. Montand en el último gran papel de
su carrera, encarnaba al astuto tío de Ugolin, Cesar Soubeyran. Ambos tramaran
un plan para arruinar al jorobado llegado de la ciudad Jean de Florette,
maravillosamente interpretado por Depardieu.
Dividida como
otros grandes clásicos del cine francés en dos partes para su exhibición, sus
cuatro horas de duración se ven con auténtico deleite. En el papel de Manon,
hija de Jean y protagonista de la segunda parte del filme, se contó con la
bellísima Emmanuelle Béart. Todo el
reparto y las maravillosas localizaciones sirvieron para recrear el mundo de la
Provenza tal y como lo narró Pagnol. Claude
Berri se impuso la tarea de dirigir esta obra que ya había sido llevada a
la pantalla por el propio Pagnol, tras una larga carrera como productor y director. Ganador del oscar al mejor
cortometraje con su primer filme Le
poulet en 1962, obtuvo la aquiescencia de François Truffaut cuando estrenó
su primer largometraje en 1967 “El viejo
y el niño”. Desgraciadamente su idilio con la crítica duró poco, siendo
acusado con frecuencia de académico e impersonal. Los mayores elogios le vinieron
por su faceta de productor, siendo responsable de muchos de los mayores logros
del cine francés: Tess (1979), de Roman
Polanski; El oso (1988), de Jean-Jacques Annaud; La reina Margot (1994), de
Patrice Cherau; Amén, de Costa Gavras (2000); la saga de Astérix y Obélix..., hasta
llegar a “Bienvenidos al norte” uno de los mayores éxitos del país galo que
tuvo una adaptación en Italia asimismo estupenda “Bienvenidos al sur”.
Un hombre
valiente, con fama de autoritario, que nos dejó otra gran adaptación literaria,
“Germinal” donde recreaba el mundo
de los mineros, a través de la novela de Zola. Hoy este homenaje va dedicado
para él, uno de los grandes nombres del cine francés, que es decir uno de los
grandes nombres del cine con mayúsculas.
donde puedo verlas
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