jueves, 28 de noviembre de 2013

La nave del destino (1952) Del barco de Chanquete no nos moverán.

 

La última película de Clarence Brown, narra la mítica aventura del  Mayflower, un barco que transportó desde Inglaterra, a los primeros moradores anglosajones de lo que hoy llamamos “Los Estados Unidos de América”. O al menos eso es lo que representan para la iconografía del país del Tío Sam.

Cuando acometió Brown este proyecto, había cumplido sesenta y dos años, treinta y dos de ellos dedicado a la dirección de películas. Desde 1926 estaba en la nómina de Metro-Goldwyn-Mayer para la que salvo alguna cesión esporádica, como la estupenda “Vinieron las lluvias” con Mirna Loy y Tyrone Power producida por la Fox, trabajó hasta el final de su carrera.


El cineasta natural de Massachusetts, comparte el  discutible honor junto a Robert Altman y Alfred Hitchcock, de haber sido nominado en seis ocasiones por la Academia, sin recibir nunca el apolíneo oscar. Un olvido, el de la famosa institución, tan ilógico como habitual. Baste decir que tres iconos del cine mundial como Cary Grant , Greta Garbo y Charles Chaplin tampoco lo recibieron y solo fueron galardonados con un oscar especial a toda su carrera.


La trayectoria cinematográfica de Brown se inició, al igual que muchos otros maestros, en el periodo mudo donde ya filmó sobresalientes cintas como “El águila negra”, un flilme de aventuras, considerados por muchos como el mejor de Valentino. También elevó al olimpo de Hollywood, a la divina Greta Garbo, cuando emparejada con John Gilbert rodó a las órdenes de Brown “El demonio y la carne”. A la legendaria actriz sueca, la volvería a dirigir en seis ocasiones más, siendo el director de la versión norteamericana de Anna Christie, la primera cinta sonora de Garbo. Otra de las grandes estrellas del estudio, Joan Crawford, protagonizó seis películas con la firma de ClarenceBrown. También fue el responsable de lanzar al estrellato a Elizabeth Taylor, con la maravillosa “Fuego de juventud”. Reputado director de actores, sus buenas maneras  y actitud dialogante, le granjearon el favor de estos.

 

Producida personalmente por Dore Schary, máximo ejecutivo de la marca del león, “La nave del destino” conto con un excelente reparto. Para interpretara al capitán del barco, el descreído y amargado Christopher Jones, se contó con el gran Spencer Tracy, que había obtenido un gran éxito con otro filme de Brown “Edison el hombre”. El amor surgirá entre el escéptico capitán y la bella Dorothy (Gene Tierney) esposa de un fanático líder religioso, al que da vida el elegante actor británico Leo Genn.

La luminosa fotografía de William Daniels en brillante Technicolor y la vibrante música del gran Miklos Rozsa, acompañan a esta singular nave, dirigida tras las cámaras, por uno de los mejores y más olvidados cineastas del Hollywood clásico.
                                         Aquí tenéis el tráiler original del filme
                                  Este video es en homenaje al gran Miklos Rozsa

 

2 comentarios:

  1. Hola Tomas, no sabía que tenias un blog, veo que lo has hecho este mismo mes.. te linkeo con Ganarse un acre. Saludos. Roy.

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  2. Acabo de hacer lo mismo con el vuestro, muchas gracias por vuestra amabilidad

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